Desde que buscó nuevos horizontes, Magga Bracoviche no ha parado de trabajar, y los frutos de esa larga cosecha se están reflejando en su hoja de vida. Es que la talentosa venezolana, que actualmente reside en la ciudad de Miami, comparte con todo su país un nuevo logro dentro de su carrera, nada más y nada menos que con el controversial periodista de farándula: Javier Ceriani.

Caracas, DC, Venezuela, 23 de junio de 2016 (D58).- Mientras tiene en conversaciones otros importantes trabajos, la venezolana se destaca en la pantalla de MegaTv Miami junto al polémico periodista de farándula.

«Ceriani» (nombre del programa) es un espacio de variedades donde el servicio a la comunidad y la información del espectáculo serán el eje central, pero todo tratado con mucho humor y diversión. 

Habrá concursos, entrevistas divertidas, participación de artistas, de personalidades de la política y de la sociedad, y sobre todo mucha participación de las redes sociales, pues la idea también es involucrar a las nuevas generaciones; en el cual Bracoviche tendrá presencia constantemente.
«Estaré realizando notas de prensa, haré de host, representaré a algunos patrocinantes y muchas cosas más. Explotaré la animación, la actuación y, tal vez  el baile, ya que les gusta que lo haga (comenta con respecto a su participación dentro del show). Estoy totalmente preparada para manejar el humor negro que lo caracteriza, de hecho, ya lo voy entendiendo, lo que me hace  interactuar más con él», expresa.

Según asegura Magga, Ceriani conocía su trabajo como conductora, y de allí la propuesta que le hizo el propio periodista para que se animara a participar en el casting y formar parte del selecto elenco. 

«Definitivamente es una gran oportunidad. En la primera semana superamos en raiting a los otros canales y eso hace que las personas vean la calidad y el talento de tu trabajo, ya que la exposición que te da la televisión es muy importante», agrega la venezolana.

Es importante destacar que está «cocinando» otros proyectos profesionales que todavía no puede develar, «pero vienen muchas cosas grandes. Quiero dejar el nombre de Venezuela en alto con éste y todos los proyectos por venir», asevera la talentosa artista.

Para conocer más acerca de Magga, no duden en visitar sus redes sociales:
Instagram / Twitter: @Maggabraco
Snapchat: @Maggadancer
Facebook: MaggaBravoviche Page

Fuente y redacción: Giselí Elie
Edición: Villasmil, Henry
imágenes: Deco Photography / @Maggabraco










El Rey Supremo de la Bachata, Luis Vargas, sigue reinventándose con su fórmula exitosa de más de 30 años en la industria, con el lanzamiento del tema «Se Dice» junto al denominado cantautor del pueblo, Wason Brazobán.

Miami, Florida, USA, 23 de junio de 2016 (D58).- Este nuevo corte, autoría de ambos cantantes, es una bachata de corte bailable donde se fusiona ambos estilos, logrando otro éxito más para estos artistas que se caracterizan por ser figuras que donde quiera que se presentan lo hacen a casa llena.
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Luis Vargas tiene en su historia discos que han logrado miles y hasta millones de ventas alrededor del mundo, con éxitos como; «Volvió el Dolor», «Loco de amor», «La mesa del rincón», «El envidioso» y más recientemente con el éxito «Debate de 4», donde participó en el tema de Romeo Santos con sus colegas Raulín Rodríguez y Anthony Santos.

En la actualidad su carrera la lleva la compañía Chocolate Productions con el apoyo del destacado empresario Elvin Polanco, quienes mantienen una apretada agenda de presentaciones en todo el territorio continental de Estados Unidos, Latinoamérica y Europa.

Sus redes sociales: @LuisVargasPage @WasonBrazoban

Fuente y redacción: Minaya PR
Edición: Villasmil, Henry 
Imágenes: @LuisVargasPage 



 






La selección inglesa desaprovechó una oportunidad de oro para meterse en octavos como primera del grupo B al obtener este lunes un triste empate sin goles ante una Eslovaquia que deberá esperar a lo que pase en el resto de los partidos para conocer su destino en la Eurocopa.

Saint-Étienne, Francia, 21 de junio de 2016 (D58).- El combinado de Roy Hodgson finalizó segundo del grupo al golear Gales a Rusia (3-0), por lo que su rival en la siguiente fase será el segundo del grupo F, en el que figuran Portugal, Hungría, Austria e Islandia, y en el que está aún todo por decidir.

Inglaterra partía como clara favorita puesto que nunca había perdido antes contra el conjunto eslovaco. Sin embargo no pudo con el bloque defensivo del conjunto que lidera el central del Liverpool Martin Skrtel. Eslovaquia, que tratará de clasificarse entre los cuatro mejores terceros, apenas inquietó a Hart.

Roy Hodgson cedió ante el clamor de la afición e incluyó en el once inicial a Vardy y Sturridge en ataque. Pero además revolucionó al equipo con otros cuatro cambios dejando a Rooney en el banco y dando entrada a Wilshire y Henderson en el centro del campo. En los laterales colocó a Clyne y Bertrand, en vez de Rose y Walker.

Mientras que Jan Kozac varió menos su once habitual con tres variaciones, entre las que destacó la entrada en punta de Duda en vez de Duris

El equipo inglés llevó la iniciativa toda la primera parte, pero acusaron la ausencia de Rooney, reconvertido a organizador con su selección. Sin el jugador del Manchester United a los «pross» les costó hilvanar el juego y a Vardy y Sturridge les costaba recibir el balón.

La animación ofensiva inglesa llegaba por la banda derecha en las paredes que tiraban Clyne y Henderson. El primer aviso de la tarde llegó a los 5 minutos tras un centro de Clyne que Vardy remató alto con la rodilla.

El delantero del Leicester a punto estuvo de marcar al cuarto de hora al recibir un balón largo y ganarle en carrera a Skrtel hasta quedarse sólo delante de Kozacik. Pero no logró superar al portero eslovaco.

Con Eslovaquia atrás e Inglaterra jugando sin imaginación el partido resultó lento y espeso. Un potente disparo de Lallana recién cumplida la media hora que obligó a Kozacik a realizar una gran parada levantó al público de sus asientos e hizo suspirar hasta el príncipe Guillermo. Pero ahí quedó todo en la primera mitad porque Eslovaquia se fue al descanso sin lanzar ni una sola vez entre los tres palos. Su estrella, Hamzik, no intervino prácticamente en el juego.

Tras la reanudación se animó el encuentro al comenzar a tomar la iniciativa el conjunto de Jan Kozak. Un fallo en la cesión al portero con el pecho de Smalling que a punto estuvo de robar Mak y una parada de Hart a un disparo de Weiss fueron las únicas ocasiones eslovacas en todo el partido.

La selección inglesa respondió con una disparo de Clyne que despejó con fortuna Kozacik.

Roy Hodgson decidió que era entonces el momento para dar entrada a Wayne Rooney, cuando aún quedaba más de media hora para el final. Llegó entonces la mejor ocasión inglesa que no fue gol por que Skrtel sacó bajo los palos un disparo de Alli tras una bonita combinación con Henderson. Con la presencia de Rooney Inglaterra tocó más el balón pero le costaba muchísimo crear peligro. El técnico inglés volvió a mover ficha y metió a Kane por Sturridge, y a Alli por Lallana, pero los cambios no dieron resultado e Inglaterra se tuvo que conformar con un decepcionante empate.

Ficha técnica:

0 - Eslovaquia:
Kozacik; Pekarik, Skrtel, Durica, Hubocan; Kucka, Pecovsky (min. 66, Gyomber), Hamsik; Mak, Weiss (min. 78, Skriniar) y Duda (min. 54, Svento).

0 - Inglaterra:
Hart; Clyne, Cahill, Smalling, Bertrand; Henderson, Dier, Wilshere (min. 52, Rooney); Lallana (min. 60, Alli), Sturridge (min. 74, Kane) y Vardy.

Arbitro: Carlos Velasco Carballo (España). Mostró tarjetas amarillas a Pecovsky (min. 23) y Bertrand (min. 51).

Incidencias: asistieron al estadio Geoffroy Guichard unas 42.000 personas para presenciar el partido correspondiente a la tercera y última jornada del Grupo B de la fase final de la Eurocopa. En el palco presidencial destacó la presencia del príncipe Guillermo, Duque de Cambridge, y el presidente de Eslovaquia, Andrej Kiska. 

Fuente y redacción: EFE
Edición: Villasmil, Henry
Fotos: EFE

 






Si hasta ahora Francia había ganado sin brillo y en el último suspiro sus partidos contra Rumanía y Albania, hoy se invirtió el guión en Lille, donde la anfitriona de la Eurocopa sedujo ante Suiza con un fútbol vistoso, animado esencialmente por Pogba, que no encontró el premio de la victoria.

Lille, Francia, 21 de junio de 2016 (D58).- El empate en el Pierre-Mauroy de Lille (noroeste) coloca a Francia como primera del grupo A (7 puntos) y a Suiza segunda (5 puntos), ambas clasificadas por delante de Albania (3) y Rumanía (1).

Francia, que llegaba al duelo con la clasificación para octavos en el bolsillo, se jugaba el liderato del grupo y reencontrarse con su afición, decepcionada al ver que su equipo había sufrido para derrotar en el último suspiro tanto a Rumanía (2-1) como a Albania (2-0).

Para Francia no solo se trataba de ganar, sino de seducir a una afición hastiada por las polémicas en torno a una selección que no lograba enamorar en su Eurocopa, en la que hasta ahora se ha hablado más de batallas de hinchas y bengalas que de fútbol.

Los de Didier Deschamps supieron interpretar el contexto y salieron a demostrar que son candidatos al título, con Pogba en el papel de hijo pródigo tras el ruido generado por su supuesto corte de mangas en el último partido. La energía les duró 45 minutos.

Situado en banda izquierda, con Evra por detrás y Griezmann por delante, el mediocentro de la Juventus se echó el equipo a la espalda y se convirtió en una pesadilla para el combinado helvético en la primera mitad.

Más allá de un lanzamiento de córner que se envenenó en el primer palo, llegó a trompicones al segundo y a punto estuvo de sorprender a la zaga francesa, poco hicieron los Suizos en la primera parte.

Pogba alejó el peligro en ese mismo saque de esquina y se colocó a la altura de la estrella que quiere ser: en el minuto 11 pudo hacer gol con un disparo lejano a pase de Gignac, en el 13 lo intentó desde el ángulo del área pequeña con un balón que Sommer tuvo que enviar a córner y en el 16 se sacó un disparo al travesaño desde fuera del área.

Solo había pasado un cuarto de hora de partido y la afición coreaba el nombre de Pogba, el más incisivo de una selección francesa que también se apoyaba en Griezman, Evra y Gignac, para crear ocasiones, pero que se fue al descanso sin ver portería.

En esa primera mitad, Suiza -que nunca había derrotado a Francia en competición oficial- se contentó con buscar el gol en acciones a balón parado, sin asumir demasiados riesgos e intentado amarran un empate que le daba el pase a octavos.

Sin cambios al descanso, Suiza buscó más la pelota en el segundo tiempo, sin olvidarse de las jugadas a balón parado, mientras Francia esperaba al contraataque, hasta que una jugada iniciada por Pogba acabó con un disparo desde la frontal de Griezmann, que obligó a esforzarse a Sommer.

La ocasión sirvió para despertar al público local, adormecido como su equipo en la segunda mitad hasta esa estirada del meta suizo, poco antes de que Deschamps retirase del campo a Coman para introducir a Payet, el héroe de los goles en el último minuto.

La decisión del técnico se reveló acertada y, tras una esforzada carrera de Sissoko por la banda derecha, el del New Castle sirvió un centro pasado que Payet estrelló en el larguero.

De nuevo al borde del pitido final, Payet volvió a tener opción de marcar de falta y el público francés, acostumbrados a los goles «in extremis», cruzó los dedos.

Pero esta vez la fortuna del último minuto no se alió con Francia, que tuvo que conformarse con el empate tras una buena primera mitad y una segunda parte más sosa en el estadio Pierre-Mauroy de Lille sobre un césped en un estado lamentable. Las tablas, de paso, permitieron a Suiza superar la fase de grupos por primera vez en su historia.

Ficha técnica:

0 - Suiza: Sommer; Lichtsteiner, Djourou, Schär, Rodriguez; Xhaka, Behrami, Mehmedi (Lang, m.86), Dzemaili, Shaqiri (Fernandes, m.78); y Embolo (Sferovic, m.73).

0 - Francia: Lloris; Sagna, Rami, Koscileny, Evra; Sissoko, Cabaye, Pogba; Coman (Payet, m.63), Griezmann (Matuidi, m.77) y Gignac.

Árbitro:
Damir Skomina (Eslovenia). Amonestó a los franceses Rami (m.24) y Koscileny (m.82).

Incidencias:
Partido de la tercera jornada del grupo A de la Eurocopa 2016 disputado en el Estadio Pierre-Mauroy de Lille ante unos 50.000 espectadores. 

Fuente y redacción: EFE
Edición: Villasmil, Henry
Fotos: EFE





Chile, con cuatro goles de Eduardo Vargas, se clasificó para las semifinales de la Copa América Centenario, donde se medirá a Colombia, tras endosarle un repaso histórico a México (0-7), que cayó de forma humillante tras 22 partidos seguidos sin conocer la derrota.

Santa Clara, EE.UU., 21 de junio (D58).- El campeón de América habló sobre el campo. De poco sirvió el abrumador dominio tricolor en las gradas del Levi's Stadium (que registró una asistencia récord), ni el 1-0 que se llevó México en el amistoso entre ambos conjuntos hace un par de semanas.

La exhibición de Chile fue absoluta. Y Vargas, que vio peligrar su participación en el encuentro por un problema de salud de su madre, vio refrendado su esfuerzo con una actuación inolvidable.

El choque enfrentaba a los dos equipos más ofensivos del torneo, con 45 tiros a puerta de Chile y 43 de su rival hasta hoy, y desde el pitido inicial se notó que ambos conjuntos tenían sed de balón y ganas denodadas de atacar a la yugular a su contrincante.

Los de Pizzi apostaron por presionar muy arriba y así lograron encorsetar a México, a quienes negaron la posesión de balón para imponer un juego muy vertical que dio sus frutos rápidamente en el minuto 9 con un magnífico pase de Vidal que Puch a punto estuvo de convertir de no ser por la barrida de Araujo en el último momento.

Instantes después, Puch se resarció y adelantó a los suyos en el marcador al materializar un rechace de Ochoa al disparo desde fuera del área de Marcelo Díaz. El gol, el primero del delantero del Necaxa mexicano en 11 partidos con la selección, dio más confianza aún a «la Roja» e invadió de dudas a los de Osorio, que tardaron más de 20 minutos en crear peligro por las bandas.

Con el centro de campo sellado por los andinos, México, bloqueado por momentos y sin paciencia ni temple con el balón, apostó por las incursiones de Hirving Lozano y Miguel Layún, además de los chispazos de calidad del «Tecatito» Corona y el «Chicharito» Hernández, pero los sustos no cesaban.

El árbitro anuló un gol de Vargas por fuera de juego en el minuto 37 tras una jugada de muchos quilates de Chile, rompiendo el mecanismo defensivo del tricolor con una precisión y calidad que se convertía en un galimatías para su rival.

Vargas no tardó en vengarse y, tras un regate antológico de Sánchez, se adelantó a Héctor Moreno, controló el balón y, de tiro cruzado, envió a la red el pase de su compañero.

El torrente de juego chileno fue a más en la segunda parte ante un México derrumbado, completamente desconocido.

Arturo Vidal aprovechó un fallo de Héctor Herrera, percutió en el área y la dejó mansa para que Alexis Sánchez subiera el tercero al marcador. Después, con su rival desarmado, llegaron otros tres tantos más de Vargas, protagonista de un extraordinario recital, mientras México se desangraba sobre el césped.

El último de ellos, en el minuto 74, después de unos clamorosos errores defensivos, producto de una grave falta de comunicación y decisión en la zaga. La afición tricolor, después de dedicar improperios contra su propio guardameta, comenzó a desertar el estadio asolada ante lo acontecido.

Se quedaron sin ver el séptimo de Puch en el minuto 88.

Ficha técnica:

0 - México:
Guillermo Ochoa; Paul Aguilar, Néstor Araujo, Héctor Moreno, Miguel Layún; Jesús Dueñas (m.46, Peña), Héctor Herrera, Andrés Guardado; Hirving Lozano (m.46, Jiménez), Jesús Manuel Corona y Javier Hernández.
Seleccionador: Juan Carlos Osorio.

7 - Chile: Claudio Bravo; José Pedro Fuenzalida, Gary Medel (m.60: Medel), Gonzalo Jara, Jean Beausejour (m.74, González); Charles Aránguiz, Arturo Vidal, Marcelo Díaz; Edson Puch, Eduardo Vargas y Alexis Sánchez.
Seleccionador: Juan Antonio Pizzi.

Goles: 0-1, m.16: Puch. 0-2, m.44: Vargas. 0-3, m.49: Sánchez. 0-4, m.52: Vargas. 0-5, m.58: Vargas. 0-6, m.74: Vargas. 0-7, m.88: Puch.
 
Árbitro: Héber Lopes (BRA) amonestó a Vidal y Guardado.

Incidencias: Partido de cuartos de final de la Copa América Centenario, disputado en el Levi's Stadium de Santa Clara (California) ante 70.547 espectadores. 

Fuente y redacción: EFE
Edición: Villasmil, Henry
Fotos: EFE

 





Colombia se clasificó hoy para las semifinales de la Copa América Centenario al derrotar a Perú en la tanda de penaltis tras un partido en el que primaron las defensas y hubo pocas ocasiones.

East Rutherford, EE.UU., 21 de junio de 2016 (D58).- David Ospina paró un penalti y Christian Cueva falló el lanzamiento definitivo desde los once metros, dando la victoria a los colombianos.

En un partido en el que primó la estrategia, Perú consiguió maniatar a Colombia, que no tuvo un día inspirado y en la que sólo se vio un único destello de James Rodríguez.

Hasta los penaltis los porteros prácticamente no tuvieron trabajo, el único tiro a puerta del lado colombiano fue un disparo de James Rodríguez en el minuto 26 que se estrelló en el palo, mientras que Perú rozó la victoria en un remate de cabeza de Christian Ramos en el tiempo de descuento, que despejó David Ospina.

Colombia regresa así a las semifinales de la Copa América por primera vez desde Perú 2004, tres años después de lograr su único título continental jugando de anfitrión.

El equipo cafetero jugará las semifinales contra el ganador del cruce entre Chile y México el próximo miércoles en el estadio Soldier Field de Chicago.

El guión previsto se cumplió al pie de la letra, Colombia asumió el rol protagonista, tomó el mando del juego, que fluía sobre todo alrededor de James y de un Cuadrado incisivo por la banda derecha, mientras que Perú concentró sus esfuerzos en la contención.

El equipo de Ricardo Gareca fue más agresivo que en su último partido ante Brasil, se plantó bien en el centro del campo y fue eficiente en la presión y el marcaje, con lo que redujo al mínimo las acometidas de la selección tricolor.

Renato Tapia y Óscar Vílchez se encajaron bien en el centro del campo y cortaron el suministro de balones a James, a pesar de lo cual el '10' de Colombia tuvo en sus botas la única ocasión peligrosa del partido, un tiro colocado que se estrelló en la cepa del poste, seguido de un remate fuera de Bacca en el rechace.

En la primera parte Colombia movió bien la pelota en el centro del campo, pero erró en el último pase, limitado por un Perú que estuvo muy atento y que, a diferencia de partidos anteriores, apenas cometió errores atrás.

Del lado de Perú, Christian Cueva sirvió de enlace para dar vitalidad a las puntuales ocasiones en las que el equipo soltó amarras de sus labores defensivas y buscó la espalda de la zaga colombiana, pero en la práctica, el cuadro inca apenas logró acercarse al área rival.

En el segundo periodo las cosas cambiaron poco, si cabe Perú se soltó algo y en algunos momentos trató de ser más ofensivo, pero no tuvo éxito al montar contragolpes, mientras que Colombia se diluyó prácticamente por completo.

En la recta final del partido, ambos equipos extremaron sus cuidados defensivos y, prefiriendo jugarse la suerte desde el punto de penalti, evitaron exponerse con intentonas ofensivas que descubrieran la defensa.

Perú rozó la victoria en la última jugada del partido, en un córner, pero Ospina salvó el testarazo de Ramos y llevó la decisión a las penas máximas, donde volvió a sobresalir parando uno de los penaltis.

Ficha técnica:


0 (2)- Perú:
Pedro Gallese; Aldo Corzo, Christian Ramos, Alberto Rodríguez, Miguel Trauco; Andy Polo (m.81, Cristian Benavente), Renato Tapia, Óscar Vílchez, Christian Cueva; Edison Flores (m.76, Raúl Ruidíaz) y Paolo Guerrero.
Entrenador: Ricardo Gareca.

0 (4)- Colombia: David Ospina; Santiago Arias, Cristian Zapata, Jeison Murillo, Farid Díaz (m.90, Frank Fabra); Carlos Sánchez, Daniel Torres (m.80, Sebastián Pérez), Edwin Cardona (m.75, Dayro Moreno), Juan Guillermo Cuadrado, James Rodríguez; Carlos Bacca.
Entrenador: José Pekerman.

Penaltis: 0-1, James Rodríguez: gol. 1-1, Raúl Ruidíaz: gol. 1-2, Juan Guillermo Cuadrado: gol. 2-2, Renato Tapia: gol. 2-3, Dayro Moreno: gol. 2-3, Miguel Trauco: parada. 2-4, Sebastián Pérez: gol. 2-4, Christian Cueva: fuera.

Árbitro: Patricio Loustau (Argentina). Amonestó por Perú a Renato Tapia; por Colombia a Cristian Zapata y Fariz Díaz.

Incidencias: partido de cuartos de final de la Copa América Centenario, disputado en el estadio MetLife de East Rutherford (Nueva Jersey), ante unos 79.194 espectadores, casi lleno. 

Fuente y redacción: EFE
Edición: Villasmil, Henry
Fotos: EFE

 






La selección española aseguró una plaza en los octavos de final de la Eurocopa de Francia 2016 con un triunfo incontestable sobre Turquía, por juego, por ocasiones, por pegada y por marcador, liderada por Manuel Agudo, «Nolito», pasador y goleador, y por Álvaro Morata, reivindicado con dos tantos (3-0).

Niza, Francia, 121 de junio de 2016 (D58).- Todo con una naturalidad y una superioridad indudable, con la jerarquía de un campeón de todo en los últimos ocho años, que manejó el partido casi siempre, que lo solucionó en cuanto tuvo ocasión, con dos goles en tres minutos, entre el 34 y el 37, y que ofreció buen fútbol y rotundidad en una Eurocopa en la que escasean ambas.

En menos de una semana, en dos jornadas, España ya ha dado el paso a la siguiente ronda. Dos victorias, cuatro goles, su portería a cero, dominadora... Ya está en octavos, pendiente de si como primera o segunda en la última cita ante Croacia -(a la «Roja» le vale con un empate el próximo martes), pero es más que todo eso.

Ha dado un golpe de autoridad. Contra las dudas, contra el pesimismo y, quizá, incluso, contra los pronósticos. Derrotada en el último amistoso por Georgia, su ambición, con el gol más tarde o más temprano, con más inquietud o menos, ha sido incuestionable, como la merecida resolución de sus dos triunfos, hoy mucho más rápidamente.

España dominó los registros del partido. Al principio, salvo algún imprevisto -una tarjeta amarilla a Sergio Ramos al minuto de juego-, cuando Turquía le planteó una potente puesta en escena, lanzado hacia adelante, con presión arriba para impedir una posesión cómoda de la «Roja», que sintió algún apuro, pero ningún susto.

Una decena de minutos de intensidad, de duelo táctico. Ni España ni Turquía querían que su adversario saliera con el balón jugado. Sobre todo la segunda. No lo consiguió apenas. Cuando la pelota voló, Burak Yilmaz se las llevó todas, aunque sin conexión después. Cuando circuló por el césped, España tocó, tocó, tocó... Y desbordó.

Superado entonces el ímpetu inicial de su adversario, la selección española se preparó para un ejercicio de paciencia al que está habituado; de un lado a otro a la espera de alguna vía a meta, como la que ofrecieron sus activos laterales, con más campo porque tanto Nolito como David Silva se cerraron al medio, insistentemente.

Del disparo desde lejos de Morata que abrió la estadísticas sobre la portería contraria, en el minuto 6, del despeje contra su propio poste de Hakan Balta, en el 10, o del cabezazo tan picado de Piqué que se marchó por encima del larguero, en el 11, al derechazo que soltó «Nolito» entre líneas allá por la media hora. Y a los goles.

En tres minutos, del 34 al 37, España fulminó a Turquía. Su pegada, en duda hasta entonces, fue imparable. También Nolito, que, primero, asistió de maravilla a Álvaro Morata para el 1-0 en un buen cabezazo del delantero y que, después, aprovechó un error más de Mehmet Topal, éste tremendo, para batir con soltura a Babacan.

En un suspiro, incrédulos los jugadores turcos, superados por dos «zarpazos» de España y demasiadas concesiones defensivas ante el actual doble campeón de Europa, ya estaba zanjado el tema del resultado para la «Roja» y para el bloque de Arda Turan, al que su plan de robo y contragolpe se quedó en nada en el primer tiempo, en apenas un lanzamiento alto de falta de Hakan Calhanoglu. Nada más.

Ni en lo que quedaba de primer tiempo (trece minutos desde el 2-0 de «Nolito») ni en toda la segunda parte, que terminó con Arda abucheado por su propio público (la afición española coreó su nombre un par de veces) y que mucho antes había comenzado con otro golpe directo de España, el definitivo por si había alguna duda.

En el minuto 48, cuando Turquía debía demostrar reacción y determinación, Andrés Iniesta desmontó de nuevo la defensa rival con un pase entre la zaga a Jordi Alba, que regaló el 3-0 a Morata, en posición de fuera de juego. No la vio el árbitro Milorad Mazic.

Pero, más allá de eso, hoy por hoy la diferencia sigue siendo muy amplia entre ambos equipos. Lo confirmó el 3-0, la jugada posterior (un buen movimiento dentro del área de Burak Yilmaz, que golpeó alto, sin efecto ni dirección), y todo el duelo. De principio a fin en Niza, donde España ya ejerce de favorita en la Eurocopa 2016.

Ficha técnica:


3 - España: De Gea; Juanfran, Piqué, Sergio Ramos, Jordi Alba (Azpilicueta, m. 80); Cesc (Koke, m. 70), Sergio Busquets, Iniesta; Silva (Bruno, m. 64), Morata y Nolito.

0 - Turquía: Babacan; Gonul, Topal, Balta, Erkin; Calhanoglu (Nuri Sahin, m. 46), Ozan Tufan, Inan (Yunus Malli, m. 70), Ozyakup (Sahan, m. 62), Arda Turan; y Burak Yilmaz.

Goles: 1-0, m. 34: Morata cabecea un centro de Nolito. 2-0, m. 37: Nolito recoge un mal rechace de Mehmet Topal y bate a Babacan. 3-0, m. 48: Morata culmina una asistencia de Jordi Alba, tras un pase al desmarque de Iniesta.

Árbitro:
Mirolad Mazic (Serbia). Amonestó al español Sergio Ramos (m. 1) y a los turcos Burak Yilmaz (m. 9) y Ozan Tufan (m. 40).

Incidencias: partido correspondiente a la segunda jornada del grupo D de la Eurocopa de Francia 2016, disputado en el estadio Allianz Riviera de Niza ante 33.409 espectadores, cifra oficial. 

Fuente y redacción: EFE
Edición: Villasmil, Henry
Fotos: EFE

 





Italia sumó su segundo triunfo consecutivo en la Eurocopa 2016, gracias a un tanto a dos minutos del final de Eder, que premió la labor defensiva de la 'azzurra' ante la Suecia de Zlatan Ibrahimovic, inofensiva e inoperante, que queda al borde de la eliminación (1-0).

Saint Martín de Ré, Francia, 21 de junio de 2016 (D58).- Italia encaró el duelo con la seguridad de haber despejado las dudas en su triunfo ante Bélgica. Con una nueva perspectiva y euforia en su afición, saltó a hacer lo que mejor sabe, defender, confiado en el desgaste de su rival y la aparición de espacios por la necesidad para acabar rematando el partido fiel a su estilo.

Suecia, que decepcionó en su estreno con un empate ante Irlanda, no mejoró. No le incomodó adueñarse del balón de inició en una búsqueda del camino de encontrar alguna grieta en la fortaleza que forma la nueva BBC (Barzagli-Bonucci-Chiellini). Apenas las incorporaciones de Olsson por el carril izquierdo generaron desequilibrio.

Ibrahimovic no cesó de buscar el éxito y convertirse de nuevo en verdugo de Italia pero todos sus intentos fueron en vano. Chiellini salvó a la heroica un centro medido a la testa del gigantón sueco a los tres minutos del duelo. La pelea fue continua pero el balance defensivo italiano fue excelente. Apenas tuvo que intervenir Buffon ante un centro con peligro de Källström o ver como no encontraba puerta una de las subidas al ataque de Olsson.

No había noticias de Italia en ataque. Peligroso. Porque es un equipo que cuando aparece es que ya se han adelantado en el marcador y tienen el premio deseado. Conte cambió las bandas con Florenzi por izquierda, habilidoso en el regate del partido con un control de tacón de espaldas precioso, y Candreva pasó a la derecha. No tuvieron acciones peligrosas en el primer acto pero mostraron que castigarían el error.

Un mal despeje pudo costar caro a Isaksson, y a cinco del descanso, de la nada, surgió un centro envenenando de Candreva que pudo cambiar el rumbo. Suecia comenzaba a desesperar y abusar del balón largo en busca de 'Ibra'. Una dejada suya la remató a las nubes Guidetti.

En la reanudación Italia decidió despertar y dar un paso al frente. Mantuvo su firmeza como bloque y buscó el ataque. 49 minutos tardó Pellé en tener una oportunidad de remate. Estaba ansioso cuando le llegó el balón. El control, en el pico del área, precedió un disparo que no encontró puerta. Una hora aguantó en el césped con dos dedos de la mano fracturados.

Necesitaba un triunfo Suecia. Tenía que correr riesgos y decidió tomarlos. Otro empate le dejaba a expensas de Bélgica. Y no tuvo para más. Italia se fue imponiendo hasta encontrar el premio final. Candreva probó a Isaksson y justo en el mismo sitio donde Iniesta puso el pase de gol a Piqué en el estadio de Toulouse, apareció la calidad de Giaccherini pero en esta ocasión el testarazo de Parolo lo repelió el travesaño.

Italia no empataba sin goles un partido desde mayo de 2014, hace 25 encuentros. Eder lo evitó a dos minutos del final. De un saque de banda nació el gol con la dejada de Zaza y el arranque, con amago y derechazo a la red del delantero. La 'azzurra' ganaba fiel a su estilo e instalaba la desesperación en Suecia, que acababa pidiendo un penalti sobre Granqvist a los 94 minutos, y con un punto queda al borde del precipicio.

Ficha técnica:


1 - Italia:
Buffon; Barzagli, Bonucci, Chiellini; Florenzi (Sturaro, m.85), Parolo, De Rossi (Motta, m.74), Giaccherini, Candreva; Eder y Pellé (Zaza, m.60).

0 - Suecia: Isaksson; Lindelöf, Johansson, Granqvist, Olsson; Larsson, Ekdal (Lewiki, m.79), Källström, Forsberg (Durmaz, m.79); Guidetti (Berg, m.85) e Ibrahimovic.

Goles:
1-0, m.88: Eder.

Árbitro: Viktor Kassai (Hungría). Amonestó a De Rossi (69) y Buffon (93) por Italia.

Incidencias: encuentro de la segunda jornada del Grupo E, disputado en el estadio de Toulouse ante 33.000 espectadores. 

Fuente y redacción: Roberto Morales (EFE)
Edición: Villasmil, Henry
Fotos: EFE






Polonia logró lo que nadie parecía conseguir, privar de la victoria a la campeona del mundo, Alemania, que se chocó contra un rival correoso y no supo desenmarañar su estructura defensiva, por lo que firmó el primer empate a cero de la competición.

París, Francia, 21 de junio de 2016 (D58).- Las dos selecciones encabezan el grupo C empatadas con 4 puntos, pero ninguna tiene asegurada la clasificación. Los germanos tendrán que buscarla en la última fecha contra Irlanda del Norte, que venció a Ucrania, frente a quienes la tendrá que perseguir Polonia. Tanto a germanos como a polacos les valdrá con el empate.

Alemania frenó su racha de seis triunfos consecutivos en fases finales, las cinco que le llevaron en Brasil a proclamarse campeona del mundo y la que logró en su debut en la Eurocopa de Francia contra Ucrania.

La Polonia de Lewanndowski, que ya había logrado derrotar a los germanos en la fase de clasificación para esta competición, volvió a demostrar que goza de una buena generación de futbolistas. No fue un empate desmerecido y no lo hubiera sido tampoco la victoria si su delantero Arkadiusz Milil hubiera aprovechado alguna de las dos grandes ocasiones que dispuso.

Apostó Joachim Löw por un equipo más dinámico en el ataque, con Drexler y Götze asociados a Müller, su hombre fetiche pese a que en los europeos no goza de la misma eficacia que ha demostrado en los Mundiales.

Sus 10 goles y 6 asistencias en los 10 partidos que ha disputado en campeonatos del mundo contrastan con su total sequía en sus 7 apariciones europeas.

En el centro del campo, reincidió en el triángulo Khedira-Kroos-Özil, pero en ningún momento lograron desestabilizar la estructura que montó para detenerlos el polaco Adam Nawalka, que consiguió a base de táctica y abnegación reducir la distancia que sobre el papel le separa de Alemania.

Un armazón con el que plantó cara a los campeones del mundo con descaro, sin achicarse ante un rival que busca levantar su cuarta Eurocopa, mientras que los polacos apenas habían acabado de celebrar su primer triunfo en un europeo a la séptima intentona.

Todo un mundo entre ellos que no quedó reflejado en el césped del Estadio de Francia, al que volvía Alemania por vez primera desde la noche aciaga del 13 de noviembre de 2015, cuando jugaba contra Francia y fue escenario de los sangrientos atentados yihadistas.

Alemania encontró un rival complejo que sacó a relucir que su maquinaria todavía no está a punto, como había quedado de manifiesto frente a Ucrania cuatro días antes.

Entonces, los germanos impusieron su proverbial eficiencia y sacaron adelante el resultado, pero ante Polonia se tuvieron que conformar con el empate.

Los alemanas con los pies en el barro, los polacos demasiado empeñados en embarrar el juego. Poco fútbol en la primera parte, apenas se rompió el guión en un golpe de genio de Müller al cuarto de hora, cuando logró arrebatar un balón a Piszczek en la banda izquierda y centrar al área donde Kroos, muy forzado, remató fuera.

Espoleada por el descaro con el que tuteaba a la campeona del mundo, Polonia se dejó en el vestuario los pocos complejos que podía aun conservar frente a la todopoderosa Mannschaft y nada más comenzar el segundo tiempo, trenzó una extraordinaria jugada que acabó con un centro de Grosicki desde la derecha que Milik remató en posición difícil, con Neuer ya batido, algo desviado.

Göotze lo intentó de disparo alejado al minuto siguiente, el primero entre los tres palos de los germanos, que detuvo el meta Fabianski. El atacante alemán demostró que, frente a la maraña polaca, su fútbol era inofensivo.

También lo vio Löw, que puso en el campo a Schürrle y a Mario Gomez, en busca de más potencia en el ataque.

Pero fue de nuevo Milik quien tuvo en sus botas adelantarse en el 69, cuando recibió un buen balón y, solo frente a Neuer, se le cruzaron las piernas. Respondió Özil con un disparo lejano que de nuevo desvió el portero.

El partido entró en una fase más dinámica, el control del primer tiempo se relajó y el fútbol, enclaustrado en el centro del campo durante el primer periodo, asomó más por las áreas.

Alemania mantuvo la presión hasta el último suspiro, buscando ese gol postrero que tan de moda se ha puesto en esta Eurocopa. Pero no lo consiguió y los polacos celebraron el empate como un trofeo precioso.

Ficha técnica:

0 - Alemania: Neuer; Höwedes, Boateng, Hummels, Hector; Kroos Khedira; Müller, Özil, Draxler (Gomez, m.72); Götze (Schürrle, m.66)

0 - Polonia: Fabianski; Piszczek, Glik, Pazdan, Jedrzejczyk; Blaszczykowski (Kapustka, m.80), Krychowiak, Maczynski (Jodlowiec, m.76), Grosicki (Peszko, m.88); Milik, Lewandowski

Árbitro: Björn Kuipers (HOL), amonestó a los alemanes Khedira, Özil y Boateng, y a los polacos Maczynski, Peszko y Grosicki

Incidencias: Partido de la segunda jornada del grupo C de la Eurocopa de Francia disputado en el Estadio de Francia de Saint Denis ante unos 80.000 espectadores. 

Fuente y redacción: Luis Miguel Pascual (EFE)
Edición: Villasmil, Henry
Fotos: EFE







Irlanda del Norte logró este jueves una victoria histórica, su primera en una fase final de una Eurocopa, al superar de manera brillante a una inoperante selección Ucraniana que se complica mucho así su permanencia en el torneo al sufrir su segunda derrota consecutiva.

Lyon, Francia, 21 de junio de 2016 (D58).- Un gol de McAuley nada más comenzar la segunda parte y otro de McGinn en el último suspiro del partido fue la merecida recompensa que logró el combinado norirlandés por el imponente juego físico y correoso que desplegó durante todo el encuentro.

Era un partido en el que los dos equipos se jugaban la supervivencia en un grupo, el C, en el que figuran como favoritos alemanes y polacos. Ucrania se estrelló ante el bloque granítico británico contra el que nunca había perdido.

Con respecto al once inicial del debut frente Alemania, el seleccionador ucraniano, Mykhailo Fomento, únicamente cambió la delantera y sacó a Selezryov dejando en el banco Zolulya.

El técnico norirlandés, en cambio, tan disgustado quedó de la prestación de los suyos ante Polonia que hizo hasta cinco cambios retocando en todas la líneas. En el lateral derecho colocó a Hughes en vez de McLaughlin y en ataque puso en punta a Washington en detrimento de Ferguson.

La nueva configuración del equipo titular dio sus frutos y en la primera parte se vio a un conjunto mucho más ofensivo y atrevido que ante los polacos. A los tres minutos Dallas envió el primer aviso en forma de lejano misil que obligó a Pyatov a tumbarse.

El combinado ucraniano tardó en reaccionar porque le costaba un mundo dar tres pases seguidos ante la salida en tromba de su rival. Un disparo de Sydorchuk lo desvió con el brazo pegado al cuerpo Cathcart en el área y el público pidió penalti, pero el árbitro no se dio por aludido.

Al juego de los dos equipos con continuos balones largos sólo le faltaba que se pusiera a llover para sentirse como en casa, y así fue. Desde el primer cuarto de hora se cerró el cielo y cayó un chaparrón que dificultó aún más el ya de por sí discreto juego de pases de ambos equipos.

Hasta el minuto 20 no tuvo Ucrania su primera ocasión de peligro que llegó con un lejano disparo de Yaroslva Rakitskiy que McGovern paró sin problemas.

El combinado de Fomenko no podía con el empuje norirlandés. Pasada la media hora Cathcart a punto estuvo de marcar al rematar un corner rozando la escuadra de la portería de Pyatov.

Ucrania no lograba controlar el juego. Konoplyanka estaba desaparecido y cuando recibía el balón no lograba conectar ni con Yarmolenko ni con Seleznyov, por lo que se fue desesperado al descanso.

El panorama no cambió en la segunda mitad. Irlanda del Norte volvió a salir en tromba y a los tres minutos McAuley hizo historia al marcar el primer gol de la historia de su selección en una fase final de una Eurocopa. Norwood ejecutó una falta indirecta al segundo palo y defensa central del West Bromwich Albion tras ganarle la espalda a Khacheridi batió a Pyatov con un cabezazo impecable.

El delirio en la grada norirlandesa, que abarrotaba el fondo de la portería ucraniana, fue total. El partido se convirtió entonces en un infierno para el once de Fomenko porque cuando se lanzó al ataque para tratar de empatar cayó una enorme granizada y el árbitro paró el encuentro durante unos minutos.

Tras la reanudación, la selección ucraniana logró por fin controlar más el balón y llegar con claridad, pero le faltó puntería. Kovalenko tuvo en sus botas la ocasión más clara, pero se le fue su disparo fuera.

A falta de dos minutos, con los once norirlandeses encerrados en su área apareció por primera vez Yarmolenko, pero una vez más el tiro salió desviado.

Y cuando parecía que la escuadra de O'Neill iba a limitarse a defender el resultado hasta el pitido final, se lanzó de nuevo en bloque al ataque y en el último minuto de los seis extras que decretó el árbitro Dallas envió un zapatazo que despejó mal Pyatov. El balón quedó a expensas del remate de McGinn en el área pequeña y el centrocampista del Aberdeen rubricó el segundo gol de una victoria para la historia.

Ficha técnica:

0 - Ucrania: Pyatov; Shevchuk, Rakitskiy, Khacheridi, Fedetskiy; Konoplyanka, Stepanenko, Kovalenko, Sydorchuk (min. 72, Garmash), Yarmolenko; Seleznyov (min. 67, Zozulya).

2 - Irlanda del Norte: McGovern; Hughes, Cathcart, McAuley, J. Evans; C. Evans (min. 90, McNair), S. Davis, Norwood; Ward (min. 68. McGinn), Dallas; y Washington (min. 83, Magennis).

Goles: 0-1, min. 48 (McAuley ) y 0-2, min. 96 (McGinn).

Arbitro: Pavel Královec (República Checa) mostró tarjetas amarillas a Seleznyov (min. 39), Ward (min. 62), Sydorchuk (min. 64) y Dallas (min. 86).

Incidencias: Asistieron al Parc Olympique Lyonnais unas 58.000 personas para presenciar partido correspondiente a la segunda jornada del Grupo C de la fase final de la Eurocopa. La hinchada norirlandesa dedicó un minuto de aplausos al seguidor que falleció el pasado domingo al caer accidentalmente de una altura de 8 metros en el paseo marítimo de Niza.

El homenaje fue en el minuto 24, la edad que tenía el aficionado norirlandés. El árbitro tuvo que interrumpir unos minutos el partido en el minuto 57 debido a la fuerte granizada que cayó sobre Lyon.

Fuente y redacción: Javier Villagarcía (EFE)
Edición: Villasmil, Henry
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A última hora, como parece ser la única forma en esta Eurocopa, el delantero Daniel Sturridge sacó a Inglaterra del fenomenal enredo en que se había metido y que la iba a dejar pendiendo de un hilo en su último partido frente a Eslovaquia.

Lens, Francia, 21 de junio de 2016 (D58).- El jugador del Liverpool, acribillado por las lesiones esta temporada, fue el auténtico revulsivo de un equipo que no conseguía hacer mella en la portería galesa pese a dominar el partido de cabo a rabo.

Casi a trompicones, con más fe que regates, Sturridge tiró una diagonal en el área gracias a un balón que le había llegado de rebote y logró embocar un tanto que da virtualmente la clasificación a los «pross».

En el estadio más británico de Francia, el Bollaert-Delelis de Lens, a una hora más propia de la Premier League, Inglaterra y Gales dejaron un derbi que no pasará a la historia pero que tuvo intensidad y donde volvió a brillar el golpeo de Gareth Bale.

Inglaterra demostró desde el saque inicial que iba a llevar la iniciativa del partido, con armas diferentes a las que tradicionalmente se asocian a su fútbol.

Esa apuesta sobrevenida por el toque (quién sabe si impuesta por el seleccionador Roy Hodgson o por sus propios jugadores, más predispuestos para la combinación que para el combate aéreo) llevó a menudo a Rooney casi entre sus dos centrales para sacar el balón jugado desde atrás.

Mientras, la disposición táctica de Gales no invitaba a engaño. Nueve gladiadores por detrás del balón, con libertad para la carreras de Bale y Robson-Kanu y con la llegada desde segunda línea de Ramsey y de Allen.

Chris Coleman alineó desde el inicio al recuperado Ledley, una apuesta por blindar el centro del campo.

Nunca dio la impresión de que los ingleses interpretaran bien cómo meter mano al muro galés, salvo en los numerosos golpes francos y saques de esquina de los que dispusieron y a los que se encomendaron

En el minuto 7, en una de las pocas jugadas en que pudieron correr, Kane metió un balón en profundidad para Lallana, que centró a Sterling, quien golpeó fatal delante del portero y mandó el cuero a las nubes.

Fue casi un espejismo, porque a partir de entonces en toda la primera parte apenas volverían a coger la espalda de un galés.

Inglaterra solo volvería a acercarse a balón parado, con sendas oportunidades de Cahill y Smalling, que detuvo el recuperado Hennessey, en el primer caso, y que salió fuera por muy poquito, en el segundo.

Entre medias, reivindicaron una mano dentro del área del galés Davies, que pareció involuntaria y que el alemán Brych decidió no castigar.

Gales esperaba su oportunidad y esta se le presentó poco antes del descanso, cuando Bale, que apenas había tenido influencia sobre el juego hasta entonces, soltó su zapatazo en una falta a unos 30 metros de la portería.

El balón fue con potencia pero no excesivamente escorado, y Hart, que llegó a tocar la pelota con los guantes, pudo haber hecho más para detener el gol galés, que llevó la locura a su hinchada, menos numerosa pero infinitamente más animosa.

El paso por el vestuario le sentó bien a Inglaterra, pero aún más el cambio de sistema operado por Hodgson, que dispuso un 4-4-2 tras haber salido con un 4-3-3 y sentó a sus dos jugadores más discutidos en la previa, Kane y Sterling, para dar la oportunidad a Vardy y Sturridge.

La salida de este último y, posteriormente, de Rashford le dio más dinamismo al ataque inglés, que pasó a encerrar a Gales, que apenas pisó el campo contrario en toda la segunda mitad.

A falta de buen fútbol, salvo el que sale casi siempre de los pies de Wayne Rooney, Inglaterra apeló en esta ocasión al carácter y la intensidad que le habían faltado en su primer partido frente a Rusia.

Con Walker y Rose convertidos casi en extremos y Sturridge ofreciéndose entre líneas como socio en todas las jugadas, los ingleses lo intentaron de muchas maneras, pero en pocas ocasiones conseguían crear peligro verdadero.

Así fue hasta que, dos minutos después de la prolongación, en la estela de los goles de Berezutski, Payet, Griezmann o Piqué, Sturridge deshizo la igualada.

Todavía tuvo tiempo Bale de mandar un cabezazo muy cerca del arco de Hart, pero el 2-1 ya no se movería del marcador. Gales se frotaba los ojos para creerlo, mientras los hinchas ingleses festejaban.

Ficha técnica:

2 - Inglaterra: Hart; Walker, Cahill, Smalling, Rose; Alli, Dier, Rooney; Lallana (Rashford, m.73), Kane (Vardy, m.46) y Sterling (Sturridge, m.46).

1 - Gales: Hennessey; Gunter, Chester, A.Williams, Davies, Taylor; Ramsey, Ledley (Edwards, m.67), Allen; Robson-Kanu (J.Williams, m.72) y Bale.

Goles: 0-1, m.42: Bale. 1-1, m.56 Vardy. 2-1, m.91: Sturridge

Árbitro: Felix Brych (Alemania). Amonestó al galés Davies (m.61).

Incidencias:
Partido de la segunda jornada del grupo B disputado en el estadio Bollaerts-Delelis ante 35.000 espectadores. 

Fuente y redacción: Enrique Rubio (EFE)
Edición: Villasmil, Henry
Fotos: EFE




 






Un gol de Antoine Griezmann, de cabeza y a la desesperada en el 90, y otro de Dmitry Payet, seis minutos después, le evitaron el ridículo a una selección francesa caótica, que pasó a octavos pero no encontró hasta entonces la forma de desarmar a la meritoria selección albanesa.

Marsella, Francia, 21 de junio de 2016 (D58).- Griezmann, señalado por su propio entrenador como uno de los culpables de los apuros pasados en la jornada inicial, compartió banquillo de inicio con Pogba, para convertirse finalmente, de nuevo en héroe, gracias a un centro de Rami desde la banda que cabeceó en el centro del área libre de marca.

Hasta ese minuto de fortuna, el modesto equipo que dirige el italiano Gianni di Biasi, el 42 del mundo, le sacó los colores a la principal favorita al título. Demostró que los dos resultados previos (un empate en 2014 y una victoria el año pasado) no fueron fruto de la casualidad y metió en el diván a una selección que ha llegado a la Eurocopa sin un plan definido.

Sacrificó esta vez Deschamps a Pogba y Griezmann, caídos en desgracia tras el partido ante Rumanía, y también cambió el dibujo. Trató de abrir el campo con Kingsley Coman y Antonhy Martial en las bandas y puso como enganche Dmitry Payet, el nuevo ídolo francés.

Pero sin dinámica de juego, ni creación en el centro del campo, Francia fue un equipo demasiado previsible para poner en aprietos al voluntarioso conjunto albanés.

Payet bajó en demasiadas ocasiones al centro del campo y no logró filtrar más que un pase que desaprovechó dentro del área Martial, demasiado lento. Como el jugador del Manchester estuvo atropellado y Coman inconsistente, todo el plan ofensivo francés consistió en buscar a Olivier Giroud por alto.

Al final del primer tiempo, dos cabezazos altos Giroud por todo botín, Deschamps tuvo la sensación de que le había fallado el plan. Sobre todo, porque Albania no sólo se fue sacudiendo el dominio, sino que jugó los últimos minutos en campo francés y sólo le falló el acierto final, ante una defensa francesa echa un flan.

Dio entrada a Pogba en lugar de Martial, tras el descanso, devolvió a Payet a la banda y Francia, aunque de forma atropellada comenzó a crear peligro; un testarazo de cabeza de Coman nada más comenzar el segundo tiempo, otro remate alto de Pogba tras un gran pase con el exterior de Payet... Y, previamente, un gran susto, porque su defensa sigue teniendo lagunas y, casi de rebote, a punto estuvo de encontrarse con el gol si no hubiese estrellado el balón al poste Ledian Memushaj (m.51).

Pasada la hora sin resultados, Deschamps ya había regresado a su idea original del comienzo del torneo; entró Griezmann y salió Coman.

Y, mientras desde la grada reclamaban a un exOlympique, André-Pierre Guignac, un nuevo cabezazo de Giroud se estrellaba en la base del poste (m.69).

Al final, a la desesperada, Deschamps complació a la grada. Guignac, que ha vuelto a la selección desde la Liga mexicana, fue recibido como un héroe, con 13 minutos por delante para arreglar lo que iba camino del desastre.

Pero ni así cambió el panorama. Aunque a empellones, la selección francesa metió a Albania en su área y en el último instante encontró la solución, primero por medio de Griezmann y, en la última jugada con Payet. Goles que evitan el desastre y dan el pase a octavos, pero que no maquillan la falta de juego del anfitrión.

Ficha técnica:


2 - Francia: Lloris; Sagna, Rami, Koscielny, Evra; Kante, Matuidi; Coman (Griezmann, m.67), Payet, Martial (Pogba, m.46); Giroud (Guignac, m.77).

0 - Albania:
Berisha; Hysaj, Ajeti (Veseli, m.84), Mavraj, Agolli; Lila (Roshi, m.71), Abrashi, Kukeli (Xhaka, m.73), Memushaj, Lenjani; Sadiku.

Goles:
1-0: m.90: Griezmann, 2-0, m.96. Payet

Árbitro: William Collum (Escocia). Amonestó a los albanés Kukeli (m.55) y Abrashi (m.80).

Incidencias: Partido de la segunda jornada del grupo B disputado en el estadio Velodrome ante 63.670 espectadores. Se dedicó un minuto de aplausos en memoria del policía Jean-Baptiste Salvaing y su esposa Jessica Schneider, secretaria en una comisaría, asesinados por un yihadista el lunes en Magnanville, a 50 kilómetros de París.

Fuente y redacción: Óscar González (EFE)
Edición: Villasmil, Henry
Fotos: EFE








Suiza remontó un gol en contra frente a Rumanía para conseguir un empate en el segundo partido del grupo A de la Eurocopa (1-1) que les deja franca la clasificación para octavos de final y mantiene a los rumanos con opciones de lograrla en la última jornada.

París, Francia, 21 de junio de 2016 (D58).- Los helvéticos se plantan con 4 puntos antes del duelo decisivo del grupo contra Francia, mientras que el logrado hoy por los rumanos les permite mantener opciones de seguir adelante en la competición a condición de que venzan a Albania en la última jornada.

El empate hizo justicia al empeño de Rumanía y al dominio de Suiza, sin que ni unos ni otros pudieran reivindicar mejor suerte.

Tras encontrarse con un penalti regalado, igual que les sucedió contra Francia el pasado viernes, los rumanos no supieron cerrar bien su defensa y recibieron el tercer gol en lo que va de Eurocopa, uno más del total que les metieron en toda la fase de clasificación.

Suiza mantuvo algunos de los problemas que ya mostró contra Albania, a quien derrotó gracias a un error del portero rival, pero contra quien concedió ocasiones pese a que jugó buena parte del partido con un hombre más por la expulsión de Lorik Cana.

Rumanía necesitaba a toda costa puntuar para no quedar definitivamente descolgado de la competición, pero los de Anghel Iordannescu se mantuvieron fieles a su estilo, un conjunto sólido atrás, dinámico con el balón, veloz en la salida.

Y Suiza siguió siendo una selección bisoña en ataque, con la pólvora mojada cuando se acercaba al área rival.

La mejor metáfora de eso es su atacante Haris Seferovic, que llegó al partido colmado de críticas por las tres claras ocasiones que falló frente a Albania. Unas críticas que no surtieron efecto, porque el jugador del Eintracht Fráncfort siguió sin ver la meta.

Falló dos duelos contra Trtarasanu, a los 7 y a los 16 minutos, en la mejor fase del juego helvético.

Dos más tarde, Lichtsteiner agarró de forma burda la camiseta de Chipciu en el área y el árbitro, que apenas estaba a dos metros, no tuvo más remedio que pitar penalti.

Como en el partido inaugural, Stancu fue el encargado de transformarlo y convertirse en el tercer futbolista que se anota dos penas máximas en una misma Eurocopa, tras el danés Frank Arnesen en 1984 y el español Gaizka Mendieta en 2000.

Rumanía se encontraba en su postura favorita ante un equipo obligado a atacar.

Diez minutos más tarde, Sapunaru pudo sentenciar en un disparo a bocajarro sobre la meta de Sommer que se estrelló en el exterior del palo.

Nada más comenzar la segunda parte, el balón se paseó por la línea de gol suizo en un disparo de Keseru, pero Djourou lo sacó a córner. Rumanía no sentenció.

Les costó sudar a los suizos para lograr el empate, que llegó en una jugada a balón parado, después de que todo lo que intentaban con la pelota en movimiento se fundiera cuando penetraban en el área.

A punto de cumplirse la hora de juego, comenzaba a perder la paciencia Petkovic con Seferovic y ya se había colocado la camiseta para saltar al césped el joven Breel Embolo, que a sus 19 años es una de las sensaciones del fútbol suizo, autor de 13 goles y 9 asistencias esta temporada con el Basilea, 17 tantos y 13 pases decisivos la pasada.

Pero en ese momento apareció el fogonazo de Behrami, que aprovechó un balón descolgado al saque de un córner para sacarse una potente volea que se coló en las mallas de Tatarasanu.

La batalla había sido intensa y el empate goloso para las dos selecciones, lo que hizo que la intensidad del partido decayera muchos enteros.

Los banquillos trataron de reactivar a sus equipos, pero faltaban fuerzas e ideas y la sangre nueva no aportó lo necesario.
 
Ficha técnica:

1 - Rumanía: Tatarasanu; Sapunaru, Chirches, Grigore, Rat (Filip, m.62); Prepelija, Pintilii (Hoban, m.46); Torje, Stancu (Andone, m.84), Chipciu; Keseru

1 - Suiza: Sommer; Lichtsteiner, Schar, Djourou, Rodriguez; Behrami, Xhaka; Shaquiri (Tarashaj, m.91), Dzemaili (Lang, m.84), Mehmedi; Seferovic (Embolo, m.64)

Goles: 0-1, m.18: Stancu (p); 1-1, m.57: Mehmedi

Árbitro: Sergei Karasev (RUS), amonestó a los rumanos Chipciu, Keseru, Prepelija y Grigore y a los suizos Xhaka y Embolo

Incidencias: Segundo partido de la primera fase del grupo A de la Eurocopa de Francia disputado en el Parque de los Príncipes de París ante unos 40.000 espectadores. 

Fuente y redacción: Luis Miguel Pascual (EFE)
Edición: Villasmil, Henry
Fotos: EFE

 









Marek Hamsik, con una asistencia a Daniel Weiss y con un golazo, dirigió la victoria balsámica de su equipo por 1-2 ante Rusia, que, con un punto en dos jornadas, se complicó la existencia en la Eurocopa de Francia.

Lille, Francia, 20 de junio de 2016 (D58).- Hamskik, la estrella eslovaca, no defraudó y condujo a su equipo hacia la victoria con una actuación destacada en colaboración con la timorata defensa rusa. Él y Weiis, con un par de zarpazos en la primera parte, abrieron el camino hacia los tres puntos que necesitaba Eslovaquia con urgencia.

La derrota ante Gales por 2-1 en la primera jornada obligaba a los hombres de Jan Kozác a ir a por la victoria. No podían especular y por eso su entrenador hizo tres cambios con la mirada puesta en el ataque.

De su primera alineación desaparecieron el lateral izquierdo Svento y regresó el lesionado Tomas Hubocan, mientras que Patrik Hrosovsky y Michal Duris dejaron su sitio a Viktor Pecovsky y Juraj Duda, respectivamente. Kózac presentaba un perfil más ofensivo que en su estreno y su equipo lo notó.

Más confianza tuvo en sus hombres Leonid Slutski, que alineó a los once jugadores que empataron en el último instante frente a Inglaterra. Sin embargo, no le salió muy bien la jugada. Casi todos saltaron al césped despistados y con aparentes pocas ganas de luchar por el triunfo.

Por primera vez, en un partido con Rusia implicada, se hablaba de fútbol. La amenaza de la UEFA de expulsar a la selección de Slutski en el caso de que se repitieran los incidentes que protagonizaron sus aficionados ante Inglaterra parece que hizo efecto.

Con la grada en calma, Eslovaquia fue el equipo que se dedicó a hacer fútbol. Salvo un disparo de Fedor Smolov que salió rozando un poste de la portería defendida por Kocacik, el resto de ocasiones las puso sobre la mesa el cuadro centroeuropeo.

Después de dos disparos de Hamsik y de Durica, Weiss, en el minuto 33, aprovechó un magnífico pase de Hamsik para marcar el primer tanto. Aleksei Berezutsky y Georgi Schennikov llegaron muy tarde, se tiraron al suelo muy pronto y Weiss marcó el primero sin casi oposición.

Con Rusia grogui y esperando el descanso para arreglar sus problemas, casi al final del acto inicial apareció Hamsik para marcar el 2-0, un golazo, con un disparo lejano que rebotó en un poste y se metió dentro de la portería rival. Junto al de Luka Modric y al de Dimitri Payet, de los mejores tantos de la Eurocopa.

Una vez más, Eslovaquia marcó ante la pasividad defensiva del equipo de Slutski, que en la reanudación hizo dos cambios para intentar una reacción de su equipo. Pavel Mamaev y Denis Glushakov sustituyeron a Aleksandr Golovin y Roman Neustädter, respectivamente.

Los cambios surtieron algo de efecto y Rusia consiguió retener el balón durante casi todo el segundo tiempo. pero lo hizo sin ideas ante un equipo que poco a poco se fue desgastando más físicamente.

Eslovaquia aguantó el marcador casi sin problemas hasta el minuto 81, cuando Glushakov recortó distancias con un cabezazo desde dentro del área eslovaca. Sin embargo, los últimos intentos rusos no surtieron efecto y Eslovaquia, con tres puntos, se colocó en buena posición para alcanzar los octavos de final.

Ante Inglaterra se jugará muchas de sus opciones, pero más complicado lo tendrá Rusia. Con esta derrota, afrontará la última jornada con un solo punto y pie y medio fuera de la competición. Hamsik, con una asistencia milimétrica y un golazo, amargó la existencia al equipo de Slutski.

Ficha técnica:

1 - Rusia: Akinfeev; Smolnikov, Berezutsky, Ignasevich, Schennikov; Golovin (Mamaev, min.46), Neustädter (Glushakov, min. 46), Kokorin (Shirokov, min. 75), Smolov, Shatov y Dzyuba

2 - Eslovaquia: Kozacic; Pekarik, Skrtel, Durica, Hubocan; Kucka, Pecovsky, Mak, Weiss (Svento, min. 72); Hamsik y Duda (Nemec, min 67).

Goles: 0-1, min. 32: Weiss. 0-2, min. 45: Hamsik. 1-2, min. 81: Glushakov.

Árbitro: Damir Skomina (Eslovenia). Mostró cartulina amarilla a Durica (min 46), por parte de Eslovaquia

Incidencias: Partido correspondiente a la segunda jornada del Grupo B de la Eurocopa de Francia disputado en el Stade Pierre Mauroy de Lille ante unos 49.000 espectadores. 

Fuente y redacción: EFE
Edición: Villasmil, Henry
Fotos: EFE


 





Argentina, que contó con Lionel Messi los segundos 45 minutos, aseguró el primer puesto del grupo D gracias al fácil triunfo ante Bolivia (3-0) y se medirá el próximo sábado 18 en Boston a Venezuela, su rival en los cuartos de final de la Copa América Centenario.

Seattle, EE.UU., 15 de junio de 2016 (D58).- «La Albiceleste» solucionó el encuentro en la primera media hora, en la que anotaron Erick Lamela (13), Ezequiel Lavezzi (15) y Víctor Cuesta (32). Messi, que venía de hacer un triplete ante Panamá, se quedó en blanco.

Bolivia, que ya venía eliminada por su polémico tropiezo ante Chile (2-1), fue un tierno rival que no logró imponerse ni física ni tácticamente frente a una Argentina que, a partir del tercer tanto, jugó a medio gas.

En los primeros 15 minutos, Argentina ya había solventado el encuentro con dos tantos, a pesar de presentar un equipo muy remozado respecto a los triunfos ante Chile (2-1) y Panamá (5-0).

Entre los cambios más destacados, Javier Mascherano dejó pasó al medio centro del Atlético de Matías Kranevitter y Lavezzi suplió al lesionado Ángel di María.

Precisamente Lavezzi, que cambió el París Saint Germanin francés por el Hebei China Fortune, intervino directa o indirectamente en los tres goles del primer periodo.

Un eslalon del exjugador del Nápoles lo paró en falta Edward Zenteno. El libre lo lanzó Lamela, que sumó el primero con suerte. Su lanzamiento golpeó en la espalda de Yasmani Duk y acabó en las redes de Carlos Lampe.

Dos minutos más tarde, en el 15, un centro del lateral Facundo Roncaglia lo finalizó Gonzalo Higuaín de cabeza. El rechace cayó en Lavezzi, que celebró el segundo.

El extremo del Hebei se vistió de asistente en el tercero. Centró para que el central Víctor Cuesta pusiese 3-0 en el 32.

Como ocurrió en el Soldier Field de Chicago el pasado día 10, más de 45.000 gargantas demandaban en el partido a Messi, resguardado por los problemas que arrastra en la zona lumbar.

El seleccionador Gerardo Martino accedió a los ruegos de la hinchada y la estrella del Barcelona ingresó en el primer minuto del segundo tiempo por Higuaín.

Demoró Messi en entrar en acción. En el 60, un libre en parecida posición al del golazo que convirtió ante Panamá se machó cerca de la escuadra izquierda de Lampe.

Buscó juego y transitó por dentro el «10» de Argentina, que se gustó en varios quiebros y amagos muy aplaudidos por el público local.

El aclamado Messi no marcó el gol con el que hubiese empatado el récord en la selección de Gabriel Omar Batistuta (54 aciertos). Habrá que aguardar el sábado 18 ante Venezuela.

Ficha técnica:

3 - Argentina: Sergio Romero; Facundo Roncaglia, Nicolás Otamendi (Jonathan Maidana, m.75), Víctor Cuesta, Ramiro Funes Mori; Matías Kranevitter, Éver Banega (Lucas Bilgia, m.45), Erick Lamela; Gonzalo Higuaín (Lionel Messi, m.45), Ezequiel Lavezzi y Sergio Agüero. 
Entrenador: Gerardo Martino.

0 - Bolivia: Carlos Lampe; Erwin Saavedra, Pedro Azogue, Edward Zenteno, Luis Gutiérrez, Nelson Cabrera; Alejandro Meleán, Jhasmani Campos, Juan Carlos Arce (Cristhian Machado, m.45), Martín Smedberg (Carmelo Algarañazm.85) y Yasmani Duk (Diego Bejarano, m.23). 
Entrenador: Julio César Baldivieso.

Goles: 1-0, m.13: Erick Lamela; 2-0, m.15: Ezequiel Lavezzi; 3-0, m.32: Víctor Cuesta.

Árbitro: Victor H.Carillo (Perú) amonestó a Edward Zenteno, Jhasmani Campos y Alejandro Meleán por Bolivia y a Éver Banega y Víctor Cuesta por Argentina.

Incidencias: Partido correspondiente a la última jornada del grupo D de la Copa América Centenario disputado en el estadio CenturyLink Field de Seattle ante unos 45.000 espectadores. 

Fuente y redacción: Antonio Torres del Cerro (EFE)
Edición: Villasmil, Henry
Fotos: EFE