Irlanda seguirá el camino de sus vecinos del norte y, tras derrotar a una Italia llena de suplentes (0-1), se clasificó por segunda vez en su historia para la segunda fase de una Eurocopa, donde se medirá contra la anfitriona Francia.

Lille, Francia, 23 de junio de 2016 (D58).- Toda una hazaña para un equipo que juega con cinco jugadores de segunda división y que con corazón y abnegación completaron el pleno de equipos procedentes de las islas británicas en octavos de final.

Irlanda le puso fe a sus opciones, que pasaban por vencer a la subcampeona de Europa, una Italia que ya estaba asegurada de acabar primera y que saltó con un equipo plagado de suplentes pensando en el duelo del próximo lunes contra España de Saint Denis por un puesto en los cuartos de final.

Irlanda, que ya jugó unos cuartos de un europeo en 1964, cuando no había fase de grupos, se medirá en Lyon contra Francia, un rival que le dejó fuera del Mundial de 2010 en la repesca y con un gol con la mano de Thierry Henry.

Pero haberse clasificado para esa ronda es ya una gesta para la modesta selección del trébol, arropada por 20.000 gargantas que se trasladaron hasta Lille y cuyas voces resonaron en el imponente estadio, con su techo cerrado por la tormenta que se anunciaba en el exterior.

Fue el último equipo en sacar el billete para los octavos, dejando fuera a Turquía, y lo hizo gracias a un gol en el minuto 85 de Brady que hizo justicia al empuje que le habían puesto durante el partido.

Italia encajó su primer gol de la competición y sumó su primera derrota. Antonio Conte solo alineó a tres jugadores de los que habían sumado las dos primeras victorias, Barzagli, Bonucci y Florenzi. Incluso el carismático Buffon, enfermo en los últimos días y amenazado de suspensión, dejó su puesto a Sirigu, en una de las pocas oportunidades del meta ante la longevidad del carismático portero de la Juve.

Si el seleccionador quería sacar conclusiones de este partido, la principal es que los teóricos suplentes se vieron dominados contra una Irlanda muy pasional pero si mucha calidad. Ni Italia será la misma contra España, ni los de Vicente del Bosque se parecerán en nada a la pasional Irlanda.

Los del trébol empujaron con fuerza y carácter, fieles a su estilo, colgando muchos balones al área en busca de la victoria, el único resultado que les servía, y obligó a trabajar la defensa transalpina, en lo que parecía más un partido de rugby que uno de fútbol.

Hendrick rozó el poste de Sirigu a los 14 minutos desde la medular del área y Brady, ocho más tarde, sacó un córner que Murphy remató de cabeza algo desviado.

Irlanda se lanzó a la desesperada y llevó a Italia al límite de la legalidad. De hecho, protestaron sonoramente, apoyados por su ruidosa afición, las decisiones del rumano Ovidiu Hategan.

La apoteosis llegó cuando al filo del descanso reclamaron un penalti de Bernardeschi a McClean.

Apenas aparecía Italia en el área irlandesa, mal signo para el seleccionador italiano, que contaba con el duelo para buscar en su banquillo aquello que no encontraba en sus titulares habituales.

Solo a los 54 De Sciglio logró hacer un centro desde la izquierda que Simone Zaza, en el punto de penalti, tuvo tiempo de colocarse y rematar aunque ligeramente por encima del larguero.

El empuje irlandés fue perdiendo aliento y el partido ritmo porque Italia seguía sin interesarse demasiado por cambiar la tónica.

En el 78 Insigne estrelló el balón en el palo izquierdo de Randolph en la culminación de un contragolpe, en una de las pocas noticias ofensivas de Italia.

Irlanda no perdió la esperanza, se aferró a su último suspiro, que llegó cuando Hoolahan se sacó un buen centro al área italiana donde Brady logró rematarlo a la red de cabeza.

La apoteosis se apoderó de las gradas de una nación que, empujada por una afición ejemplar, sigue soñando en la Eurocopa.

Ficha técnica:

0 - Italia: Sirigu; Barzagli, Bonucci, Ogbonna; Bernardeschi (Darmian, m.61), Sturaro, Thiago Motta, Florenzi, De Sciglio (El Shaarawy, m.82); Zaza, Immobile (Insigne, m.75)

1 - Irlanda: Randolph; Coleman, Duffy, Keogh, Ward; McClean, McCarthy (Hoolahan, m.77); Hendrick, Murphy (McGready m.70), Brady; Long

Goles: 0-1, m.85: Brady

Árbitro: Ovidio Hategan (RUM), amonestó a los italianos Sirigu, Barzagli y Insigne, y a los irlandeses Long y Ward

Incidencias: Partido de la tercera jornada del grupo E de la Eurocopa de Francia disputado en el estadio Pierre Mouroy de Lille ante unos 50.000 espectadores.

Fuente y redacción: EFE
Edición: Villasmil, Henry
Fotos: EFE





Una sólida Alemania cuajó este martes su mejor partido de esta Eurocopa con un aluvión de ocasiones y el dominio total del centro del campo, aunque sólo Mario Gomez logró hacer gol ante una Irlanda del Norte replegada y sin filo que todavía opta a clasificarse para octavos de final.

París, Francia, 23 de junio de 2016 (D58).- Con su victoria de esta noche en el estadio Parque de los Príncipes de París, Alemania acaba primera del Grupo C (7 puntos), seguida de Polonia (7), Irlanda del Norte (3) y Ucrania (0).

Los germanos se medirán contra el tercero del grupo A, B o F el próximo domingo en Lille, mientras que Irlanda del Norte tendrá que esperar a que concluya este miércoles la fase de grupos para saber si se clasifica por primera vez en su historia para octavos de final de una Eurocopa.

El seleccionador alemán, Joachim Löw, acertó con el esquema táctico, sentando de inicio al centrocampista Julian Draxler en beneficio de Mario Gomez, delantero titular con Thomas Müller como falso nueve y Götze por banda izquierda.

El tridente germano encontró la efectividad que echó en falta ante Ucrania (2-0) y Polonia (0-0), acompañado por un afinado Özil que volvió locos a los norirlandeses entrando por banda derecha.

Alemania, que salió como un tanque vio como Gomez sumaba su 28ª diana con la «Nationalmannschaft» y cerraban la fase de grupos sin encajar, mientras que los norirlandeses renunciaron a la pelota y lo apostaron todo al contraataque, con Washington en punta y sin premio.

El rodillo alemán, con las piezas bien engrasadas desde el inicio, tuvo su primera ocasión en el minuto 7, cuando Özil sirvió un precioso balón al centro del área que Müller estrelló contra el portero.

Después llegó otra oportunidad para el propio Özil y seguidamente fue Götze el que tuvo el gol en sus botas, mientras que los de Michael O'Neill lo intentaban con balones largos para un solitario Washington.

Sonaba la pegadiza «Will Grigg's on Fire» en el fondo norirlandés en el que atacaba Alemania cuando en el minuto 23 Müller volvió a gozar de otra clara oportunidad que tampoco supo transformar y se fue rozando el palo.

Pero tres minutos después Alemania por fin encontró portería gracias a una triangulación que inició Özil, acomodó Gomez y devolvió Müller hacia atrás para que el propio Gomez colocara el balón en la red de McGovern, con la defensa norirlandesa vendida.

Los alemanes no se relajaron y cinco minutos después Müller estrelló un magnífico centro de Mario Gomez en el travesaño, poco antes de que concluyera una primera mitad en la que Alemania tiró 12 veces a puerta, por un tímido intento de Irlanda del Norte.

Sin cambios en el descanso en ninguno de los dos equipos, Alemania volvió a insistir desde el inicio del segundo tiempo, donde la primera ocasión clara llegó con un disparo de Götze que se marchó lamiendo el palo, poco antes de ser sustituido por Schürrle.

Los norirlandeses no bajaron los brazos, e incluso llegaron a inquietar la portería germana en una contra que la zaga resolvió con autoridad, mientras en el plano ofensivo Khedira y Gomez seguían probando los reflejos del meta de Irlanda del Norte.

O'Neill reaccionó retirando a Washington y dando entrada al delantero del Norwich City Kyle Lafferty, estrella norirlandesa que repitió como suplente, a lo que Löw respondió retirando a Khedira para dar entrada a Schweinsteiger, que llegó físicamente tocado a la Eurocopa.

En la recta final del partido, con los del Úlster entregados al dictado ofensivo de la campeona del mundo y visiblemente cansados, lograron evitar que los germanos cerrasen un marcador más abultado pese a las reiteradas oportunidades de Özil o Gomez.

Si el partido acabó con victoria por la mínima de Alemania, pese la diferencia de goles se anunciaba crucial para decidir el liderato del grupo, es en gran parte culpa la tuvo el portero McGovern, el mejor de los chicos de Belfast.

Ficha técnica:

0 - Irlanda del Norte: McGovern; J. Evans, Cathcart, McAuley, Hughes; Dallas, Nortwood, Davis (C), C.Evans (M.Ginn, m. 85), Ward (Magennis, m. 70); y Washington (Lafferty, m. 59).

1 - Alemania: Neuer (C); Hector, Hummels, Boateng (Höwedes, m. 76), Kimmich; Khedira (Schweinsteiger, m. 69), Özil, Müller, Kroos; Götze (Schürrle, m. 56) y Gomez.

Goles: 0-1: Gomez, m. 29;

Árbitro: Clément Turpin (Francia). No amonestó a ningún jugador.

Incidencias: Partido de la tercera jornada del grupo C de la Eurocopa 2016 disputado en el Estadio Parque de los Príncipes de París ante unos 50.000 espectadores.

Fuente y redacción: EFE
Edición: Villasmil, Henry
Fotos: EFE








Irlanda del Norte logró este jueves una victoria histórica, su primera en una fase final de una Eurocopa, al superar de manera brillante a una inoperante selección Ucraniana que se complica mucho así su permanencia en el torneo al sufrir su segunda derrota consecutiva.

Lyon, Francia, 21 de junio de 2016 (D58).- Un gol de McAuley nada más comenzar la segunda parte y otro de McGinn en el último suspiro del partido fue la merecida recompensa que logró el combinado norirlandés por el imponente juego físico y correoso que desplegó durante todo el encuentro.

Era un partido en el que los dos equipos se jugaban la supervivencia en un grupo, el C, en el que figuran como favoritos alemanes y polacos. Ucrania se estrelló ante el bloque granítico británico contra el que nunca había perdido.

Con respecto al once inicial del debut frente Alemania, el seleccionador ucraniano, Mykhailo Fomento, únicamente cambió la delantera y sacó a Selezryov dejando en el banco Zolulya.

El técnico norirlandés, en cambio, tan disgustado quedó de la prestación de los suyos ante Polonia que hizo hasta cinco cambios retocando en todas la líneas. En el lateral derecho colocó a Hughes en vez de McLaughlin y en ataque puso en punta a Washington en detrimento de Ferguson.

La nueva configuración del equipo titular dio sus frutos y en la primera parte se vio a un conjunto mucho más ofensivo y atrevido que ante los polacos. A los tres minutos Dallas envió el primer aviso en forma de lejano misil que obligó a Pyatov a tumbarse.

El combinado ucraniano tardó en reaccionar porque le costaba un mundo dar tres pases seguidos ante la salida en tromba de su rival. Un disparo de Sydorchuk lo desvió con el brazo pegado al cuerpo Cathcart en el área y el público pidió penalti, pero el árbitro no se dio por aludido.

Al juego de los dos equipos con continuos balones largos sólo le faltaba que se pusiera a llover para sentirse como en casa, y así fue. Desde el primer cuarto de hora se cerró el cielo y cayó un chaparrón que dificultó aún más el ya de por sí discreto juego de pases de ambos equipos.

Hasta el minuto 20 no tuvo Ucrania su primera ocasión de peligro que llegó con un lejano disparo de Yaroslva Rakitskiy que McGovern paró sin problemas.

El combinado de Fomenko no podía con el empuje norirlandés. Pasada la media hora Cathcart a punto estuvo de marcar al rematar un corner rozando la escuadra de la portería de Pyatov.

Ucrania no lograba controlar el juego. Konoplyanka estaba desaparecido y cuando recibía el balón no lograba conectar ni con Yarmolenko ni con Seleznyov, por lo que se fue desesperado al descanso.

El panorama no cambió en la segunda mitad. Irlanda del Norte volvió a salir en tromba y a los tres minutos McAuley hizo historia al marcar el primer gol de la historia de su selección en una fase final de una Eurocopa. Norwood ejecutó una falta indirecta al segundo palo y defensa central del West Bromwich Albion tras ganarle la espalda a Khacheridi batió a Pyatov con un cabezazo impecable.

El delirio en la grada norirlandesa, que abarrotaba el fondo de la portería ucraniana, fue total. El partido se convirtió entonces en un infierno para el once de Fomenko porque cuando se lanzó al ataque para tratar de empatar cayó una enorme granizada y el árbitro paró el encuentro durante unos minutos.

Tras la reanudación, la selección ucraniana logró por fin controlar más el balón y llegar con claridad, pero le faltó puntería. Kovalenko tuvo en sus botas la ocasión más clara, pero se le fue su disparo fuera.

A falta de dos minutos, con los once norirlandeses encerrados en su área apareció por primera vez Yarmolenko, pero una vez más el tiro salió desviado.

Y cuando parecía que la escuadra de O'Neill iba a limitarse a defender el resultado hasta el pitido final, se lanzó de nuevo en bloque al ataque y en el último minuto de los seis extras que decretó el árbitro Dallas envió un zapatazo que despejó mal Pyatov. El balón quedó a expensas del remate de McGinn en el área pequeña y el centrocampista del Aberdeen rubricó el segundo gol de una victoria para la historia.

Ficha técnica:

0 - Ucrania: Pyatov; Shevchuk, Rakitskiy, Khacheridi, Fedetskiy; Konoplyanka, Stepanenko, Kovalenko, Sydorchuk (min. 72, Garmash), Yarmolenko; Seleznyov (min. 67, Zozulya).

2 - Irlanda del Norte: McGovern; Hughes, Cathcart, McAuley, J. Evans; C. Evans (min. 90, McNair), S. Davis, Norwood; Ward (min. 68. McGinn), Dallas; y Washington (min. 83, Magennis).

Goles: 0-1, min. 48 (McAuley ) y 0-2, min. 96 (McGinn).

Arbitro: Pavel Královec (República Checa) mostró tarjetas amarillas a Seleznyov (min. 39), Ward (min. 62), Sydorchuk (min. 64) y Dallas (min. 86).

Incidencias: Asistieron al Parc Olympique Lyonnais unas 58.000 personas para presenciar partido correspondiente a la segunda jornada del Grupo C de la fase final de la Eurocopa. La hinchada norirlandesa dedicó un minuto de aplausos al seguidor que falleció el pasado domingo al caer accidentalmente de una altura de 8 metros en el paseo marítimo de Niza.

El homenaje fue en el minuto 24, la edad que tenía el aficionado norirlandés. El árbitro tuvo que interrumpir unos minutos el partido en el minuto 57 debido a la fuerte granizada que cayó sobre Lyon.

Fuente y redacción: Javier Villagarcía (EFE)
Edición: Villasmil, Henry
Fotos: EFE









A la séptima, tras dos Eurocopas en blanco, Polonia sumó su primera victoria en un Europeo, al superar a una arcaica Irlanda del Norte, que confió en su espíritu defensivo, pero se vio derribada por un gol del delantero del Ajax Arkadius Milik, al comienzo del segundo tiempo.

Marsella, Francia, 13 de junio de 2016 (D58).- El gol de Milik, el más joven (22 años) en marcar en un torneo continental en la historia de la selección polaca, premió su mayor intención ofensiva, en un partido de escasa calidad.

Porque Irlanda del Norte, que ha hecho de la resistencia su virtud y llevaba invicta doce encuentros, es como dice su técnico, Michael O'Neill, «un equipo contra el que nadie quiere jugar». Entrega el balón al rival y se repliega sin sonrojo.

Polonia, al contrario, marcó más goles que Alemania en la fase de clasificación, porque no sólo contaba con el mejor goleador (Lewandowski), sino que éste está bien acompañado.

Por eso, como el equipo de Michael O'Neill centró sus esfuerzos en que no le llegase el balón a Lewandowski, fue el joven Arkadius Milik el que tuvo las mejores ocasiones en el primer tiempo, pero el delantero del Ajax no logró superar a Michael McGovern, en el minuto 28, y envió el balón alto con todo a favor, tres minutos después.

El conjunto de Adam Nawalka, claro dominador, aún tendría una nueva ocasión por medio del joven Batorsz Katpustka, desbaratada por McGovern.

La muralla, sin embargo, la derribó al comienzo del segundo tiempo Milik, con un fuerte disparo, asistido por Kuba Blaszykowski, el más activo en el juego polaco.

Los norirlandeses tardaron 20 minutos en reaccionar, pero a Conor Washington, que se plantó solo en el área polaca, le faltó rapidez para superar la salida de Szczesny.

Sólo al final, cuando Polonia, que avisó con un disparo lejano del sevillista Krychowiak, vio más cerca su primera victoria en un torneo continental y le pudo el nerviosismo, logró el equipo británico acercarse con peligro, pero a sus jugadores les faltó calidad para aprovechar los fallos de un conjunto que tembló demasiado antes de desatar la euforia de sus aficionados.

Ficha técnica:

1 - Polonia: Szczesny; Piszczek, Glik, Pazdan, Jedrzejczyk; Blaszczykowski (Grosicki, m.80), Krychowiak, Maczynski (Jodlowiec, m.78), Kapustka (Peszko, m.88); Milik y Lewandowski.

0 - Irlanda del Norte: McGovern; McLaughlin, Cathcart, Jonny Evans, McAuley; McNair (Dallas, m.46), Norwood (Washington, m.66), Davis, Baird (Ward, m.76); Ferguson y Lafferty.

Gol: 1-0, m.51: Milik

Árbitro: Ovidu Hategan (Rumanía). Amonestó a los polacos Katpustka (m.65) y Piszcek (m.88), y al norirlandés Cathcart (68).

Incidencias: Partido de la primera jornada del grupo C de la Eurocopa disputado en el estadio Allianz-Riviera de Niza, ante 33.742 espectadores. 

Fuente y redacción: EFE
Edición: Villasmil, Henry
Fotos: EFE