Los Panthers de Carolina hicieron valer el poder de su juego ofensivo y alcanzaron la final de la Conferencia Nacional (NFC) al vencer por 31-24 a los Seahawks de Seattle, los campeones defensores del título, en el segundo partido de la Ronda Divisional.

Charlotte, EUA, 20 de enero de 2016 (D58).- La ventaja de 31 puntos con la que acabó la primera parte fue una renta suficiente que permitió a los Panthers aguantar la presión de de los Seahawks en la segunda, en la que estuvieron muy cerca de darle la vuelta al marcador.

Pero no lo consiguieron y los Seahawks quedaron eliminados sin que puedan seguir en la defensa del título y llegar por tercer año consecutivo al Super Bowl de la Liga Nacional de Fútbol Americano (NFL), que este año se va a disputar en Santa Clara (California).

Mientras que los Panthers tendrán de rivales en la gran final por el título de campeones y un boleto para el Super Bowl 50 a los Cardinals de Arizona, que la pasada noche en tiempo de prórroga derrotaron 26-20 a los Packers de Green Bay.

El mariscal de campo Cam Newton lanzó para una anotación y corredor Jonathan Stewart, que volvió de una lesión, hizo dos anotaciones por tierra para ser las armas de la ofensiva de los Panthers, que ganaron, pero no convencieron ni hicieron un buen final.

El equipo con la mejor marca de la temporada regular (15-1) se encontró con una primera parte en la que la defensa de los Seahawks no supo descifrar el juego de Stewart que se iba a convertir en factor clave de la ofensiva de los Panthers.

Stewart, que se había perdido los tres últimos partidos de la temporada regular con una lesión en el pie izquierdo, completó el duelo ante los Seahawks con 19 acarreos y 109 yardas ganadas por tierra.

Newton no brilló, pero hizo su trabajo y aunque fue superado en el duelo individual por Russell Wilson, su aportación fue más práctica ya que ayudó al triunfo de los Panthers.

El mariscal estelar del equipo de Carolina completó 16 de 22 pases para 161 yardas, hizo un envío de anotación, no permitió interceptaciones, lo derribaron una vez y colocó en 108,3 el índice de pasador.

Mientras que el defensivo Luke Kuechly logró una interceptación y regresó el balón hasta la zona de las diagonales, que al final sería la que también hiciese la diferencia.

Los Seahawks, que tuvieron marca de 11-7 en temporada regular, dos veces consecutivas campeones de la NFC, entraron al partido en la segunda mitad, cuando consiguieron sus 24 puntos, pero fueron insuficientes para aspirar a la victoria.

Los campeones de la NFC confirmaron la tendencia de toda la temporada de no ser consistentes el partido completo en su juego defensivo y ahí les costó el derecho a seguir en la lucha por estar en el Super Bowl.

Wilson fue el mejor del equipo al completar 31 de 48 pases para 366 yardas con tres envíos de touchdown, dos interceptaciones, lo derribaron cinco veces y bajó a 91,1 el índice de pasador.

Junto a Wilson el hombre más importante de los Seahawks en el ataque fue el receptor abierto Jermaine Kearse que hizo 11 capturas para 110 yardas con dos anotaciones.

Mientras que la vuelta del corredor estelar Marsshawn Lynch no le resultó a los Seahawks factor ganador al quedarse con sólo seis acarreos y apenas 20 yardas de ganancia, inferior a las 32 que logró Wilson en los tres avances que hizo por tierra, uno de ellos de 14 yardas.

Sin la aportación de la ofensiva terrestre los Seahawks tampoco pudieron contrarrestar la inspiración de Stewart.

EFE











Los Seattle Seahawks lograron imponerse en tiempo extra 26-20 a los Broncos cuando Denver tenía anímicamente el partido en las manos y tras un regreso espectacular en 59 segundos de Peyton Manning.

Seattle, U.S.A., 22 de septiembre de 2014 (D58).- Ambos equipos consiguieron sus primeros puntos en sus primeras ofensivas, Seattle con gol de campo de 20 yardas de Steven Hauschka al no poder llegar la ofensiva a la zona de anotación cuando estuvieron a una yarda de lograrlo; y Brandon McManus con uno de 24 yardas por Denver (3-3).

Al minuto tres del segundo cuarto llegó el primer touchdown del partido, Russell Wilson lanzó un maravilloso pase de 39 yardas al receptor Ricardo Lockette, quien se llevó el ovoide en la zona de anotación a pesar de la presión del esquinero de Denver, Aqib Talib, y poner la pizarra a favor con el punto extra bueno 3-10.

Seattle se fue al descanso con el marcador a favor 3-17, cuando Wilson en primera y gol y a 17 segundos de finalizar el primer medio tiempo, encontró a su corredor Marshawn Lynch, quien se colocó como receptor e hizo trayectoria de rápido dentro para poder llevarse el balón en la zona de anotación.

Para el último cuarto, la defensiva de los Broncos mostró la casta con dos acciones: logró dos puntos al atrapar a Lynch en la zona de anotación de Seattle; la jugada la hicieron los defensivos Nate Irving y T.J. Ward (5-17). La otra, la defensiva logró una intercepción a Wilson (CB Chris Harris) en la 19 de los Halcones Marinos. Con jugada optativa para el #80 Demaryius Thomas, Denver logró la primera anotación de su ofensiva en el partido (12-17).

Los Broncos se acercaban con poco más de dos minutos en el partido, y en tercera y once, Manning fue interceptado al buscar a Wes Welker entre tres defensivos llevándose el ovoide el safety Kam Chancellor, que se convirtieron en tres puntos con gol de campo de Hauschka de 28 yardas (12-20).

Manning y los Broncos con 59 segundos realizaron el milagro y empataron el partido, el veterano mariscal de campo encontró en la zona de anotación con pase de 26 yardas al ala cerrada Jacob Tamme y a pesar el alarido de los aficionados de los Seahawks, Denver logró la conversión de dos puntos con pase a Demaryius Thomas por el centro de la anotación y ante la presión de los profundos de Seattle (20-20) para que el partido se fuera a tiempo extra.

Los de casa ganaron el volado e iniciaron a la ofensiva, la cual llegaron a la zona roja con varios acarreos del propio Wilson. Seattle entró a la zona de anotación con una carrera de seis yardas de Marshawn Lynch para llevarse la victoria.

Wilson completó 24 de 34 pases para 258 yardas, 2 touchdowns y una intercepción; Manning logró 303 yardas en 31 pases completos de 49 intentos, dos anotaciones y una intercepción en contra.

El ex receptor de los Steelers, Emmanuel Sanders tuvo 149 yardas en 11 recepciones.

Denver (2-1) y Seattle (2-1) descansan para la Semana 4.

Resultados de la 3era. semana de la NFL 2014

Buccaneers 14, Falcons 56
Cowboys 34, Rams 31
Redskins 34, Eagles 37
Steelers 37, Panthers 19
Chiefs 34, Dolphins 15
Saints 20, Vikings 9
Bengals 33, Titans 7
Patriots 16, Raiders 9
Ravens 23, Browns 21
Chargers 22, Bills 10
Lions 19, Packers 7
49ers 14, Cardinals 23
Giants 30, Texans 17
Colts 44, Jaguars 17

Chicago Bears vs. New York Jets, juego del lunes 22 de septiembre

Fuente web






Malcolm Smith de Seahawks, el JMV del Super Bowl
La defensiva de los Seattle Seahawks fue dominante, poderosa, abrumadora, mostrada y ascendente. Ustedes elijan un adjetivo. La defensiva de los Seahawks destruyó a la ofensiva históricamente potente de los Denver Broncos en un triunfo 43 a 8 en el Super Bowl XLVIII.

New Jersey, USA, 03 de febrero de 2014 (D58).- Sin embargo, solo uno de ellos podía ganar el premio al Jugador Más Valioso. Los votantes eligieron al apoyador Malcolm Smith para que representara a la defensiva de los Seahawks.

El cuerpo de apoyadores de Seattle se vio beneficiado por una presión al mariscal dominante y torturó a Peyton Manning toda la noche.

Smith se aprovechó, haciendo varias jugadas enormes. El jugador de tercer año regresó una intercepción para touchdown y recuperó un balón suelto. También añadió nueve tackleos como parte de la imparable defensiva de Seattle.

El joven entró a la alineación titular en la semana 15 para reemplazar al subvaluado K.J. Wright y los Seahawks no perdieron ni un paso. La capacidad de Smith de cubrir en espacio y tacklear es representativa de la profundidad y tenacidad de Seattle.

En el Super Bowl XLVIII Smith estuvo en el momento adecuado en el lugar adecuado con una intercepción a Manning que devolvió 69 yardas para un «pick six».

Smith ganó el premio al JMV, pero entiende que este fue un dominio de todo el equipo.

Prensa NFL
Foto: AFP

El final soñado era ver a Peyton Manning levantar el Trofeo Lombardi para completar la temporada más grande de la historia. Lamentablemente para él, nadie le informó a los Seattle Seahawks, quienes se impusieron en el Super Bowl XLVIII, con marcador 43 a 8.

New Jersey, USA, 03 de febrero de 2014 (D58).- El equipo de Pete Carroll aprovechó una actuación plagada de errores de los Denver Broncos para imponerse 43 a 8, con lo que el equipo que no tenía un solo jugador con experiencia en el Super Bowl se erigió con su primer campeonato y terminó con la temporada de ensueño del campeón de la AFC.

Todo el mundo esperaba que la defensiva de los Seahawks fuera tan imponente como es ya costumbre, pero nadie esperaba que el ataque épico de Denver se ahogara a sí mismo con errores. La debacle para los de naranja comenzó en la primera jugada del partido cuando Manny Ramírez centro antes de lo esperado, con el ovoide volando por encima de la cabeza del Más Valioso de 2014. Knoshon Moreno recuperó el balón en su zona de anotación para un safety, la anotación más rápida de la historia tras solo 12 segundos.

La confianza pareció escapar por completo a los Broncos, que no consiguieron un primero y diez sino hasta bien entrado el segundo cuarto. Seattle logró adentrarse dos veces profundo en el territorio de Broncos, pero solo logró goles de campo. Eso cambió tras el segundo error de Manning, un pase que el veterano lanzó muy por encima de Julius Thomas y que cayó cómodamente en las manos de Kam Chancelor. La fatigada defensiva no soportó más y permitió a Marshawn Lynch entrar a las diagonales para poner el marcador 15 a 0 a mediados del segundo cuarto. Cuando Manning y los Broncos parecían por fin echar a andar un ataque una excelente presión de Cliff Avril llevó a una intercepción de Malcolm Smith, devuelta 69 yardas hasta las diagonales para poner la cuesta muy arriba para los locales administrativos.

Los Broncos solo podían esperar que el largo medio tiempo del Super Bowl sirviera para corregir el camino en busca del regreso más grande de la historia de la NFL. Esa esperanza recibió un duro golpe cuando Percy Harvin, jugando apenas en su segundo partido de la temporada, devolvió la patada de salida de la segunda mitad 87 yardas para sacar el aire por completo a Denver. Para terminar por completo con las ambiciones del equipo con la mejor ofensiva de la historia. Cuando una vez más los Broncos parecían armar una buena serie ofensiva Demaryius Thomas atrapó un pase que llevó 23 yardas antes de perder el ovoide, que recuperó en otra jugada estelar Malcolm Smith. Russell Wilson hizo pagar a Denver completando tres de cuatro culminando con un touchdown de 23 yardas a Jermaine Kearse. Los Broncos rompieron el cero al final del tercer cuarto para preservar la dignidad, pero Wilson puso los números finales con su segundo touchdown, a Doug Baldwin.

El partido no fue ni remotamente tan disparejo como indicó el marcador, al menos estadísticamente, pero fueron los viejos adagios los que se hicieron patentes una vez más. Los Broncos consiguieron 341 yardas contra las 306 de Seattle y empataron con 18 primeros y diez, pero sus tres entregas de balón, con todas ellas culminando en las diagonales para 21 puntos, y el safety, fueron la diferencia. ¿Otro cliché? La defensiva gana campeonatos. Cada vez que Manning parecía entrar en un ritmo, la defensiva los desmantelaba con una jugada grande.

Wilson, por su parte, hizo lo necesario. El joven mariscal nunca fue imprudente ni intentó hacer más de lo necesario. La selección de tercera ronda completó 18 de 25 para 206 yardas y un rating de 123.1. En comparación, Manning completó 34, record para el Super Bowl, de 29 para 280 yardas, un touchdown y dos intercepciones para un rating de 73.5.

El equipo de Pete Carroll se va así con su primer título en una temporada perfecta, si bien menos mediática que la de los Broncos. Al César lo que es del César: los Seahawks fueron uno de los mejores equipos en temporada regular y, tras pasar sustos ante los New Orleans Saints, se apropió de MetLife Stadium para llevarse el Lombardi. 

Para los Broncos solo queda preguntarse lo que pudo haber sido y, claro, la pregunta en la mente de todo el mundo de la NFL: ¿Tendrá el gran Peyton Manning una oportunidad más?.

Prensa NFL
Fotos AFP