El té que desde sus inicios se toma y se produce en la cultura oriental (países como China continental, India, Sri Lanka, Taiwán, Japón, Nepal, Australia y Kenia), es uno de los mejores antioxidantes que hay en el mundo.
Maracaibo, Zulia, Venezuela, 23 de junio de 2015 (D58).- Gracias a los holandeses, quiénes fueron los que introdujeron esta hoja medicinal al mundo occidental, hoy en día este producto se consume en gran cantidad.
Hablando un poco más de su historia, los chinos y los japoneses lo usan en sus rituales espirituales y culturales, mientras que en otros países, representa status en las altas esferas sociales, y por último, para los gitanos, era una de tantas formas para sacarles dinero a los clientes, pues leían el té.
Estas hojas medicinales llegaron a Japón en el año 618 d.C. gracias al monje budista llamado Eichu en uno de sus viajes a China. En el país Nipón esta bebida fue asociada con los pensamientos Zen del pensador budista Lu Yu, comenzando así la tradición en las que se resaltan los modales y la simpleza.
También con esta bebida se destacan la armonía, el respeto, la pureza y la tranquilidad. El té también contiene intrínsecamente historias de civilizaciones antiguas donde se habla de monjes, corsarios, mercaderes y estudiantes que encontraban en esta planta un sosiego a la hora de tomarlo.
En Inglaterra, por su parte, fue una forma política y económica de reforzar los valores de la puntualidad y las buenas maneras, y para que la sociedad dejara un poco los hábitos cerveceros que eran muy altos en dicho país.
En estos tiempos actuales tan agitados, el té es uno de los mejores remedios para controlar el estrés, sin tener que hacer uso de medicamentos que traen efectos secundarios. Lo que hace con el estrés exactamente es que incrementa la producción de gaba, dopamina y ondas cerebrales alfa. En el caso de estas hojas medicinales, es distinto. Gracias a la L-teanina, un aminoácido que contiene, ayuda a acelerar el metabolismo y reduce los niveles de colesterol, lo que permite menos enfermedades de tipo coronario y de circulación, además que produce un estado de calma y relajación, gracias a que mantiene el sistema neurológico despierto.
El té se puede encontrar en diferentes formas. Está el negro que es el más común, es de sabor amargo y fuerte, pero que es expuesto a un proceso de oxidación. El blanco, al igual que el verde –muy consumido en estos tiempos- ayuda al rejuvenecimiento de la piel además de las grandes cantidades de vitamina C que contienen, evitando la oxidación y el mantenimiento efectivo de dientes, encías, cartílagos y huesos. Por su parte, el té rojo tiene propiedades que permiten evitar los dolores de cabeza.
Entre otros beneficios de tomar té, específicamente el verde, ayuda a combatir la migraña, el cansancio mental, es un excelente bronco dilatador, es un diurético natural, previene problemas bucales como las caries y previene la formación de úlceras. También tiene propiedades antidiarreicos por su alto contenido de taninos que tienen como función principal desacelerar la actividad intestinal, además de ser un desinflamatorio muy efectivo.
Hoy en día esta bebida se puede conseguir en las diferentes tiendas naturistas de las ciudades, e inclusive, en los supermercados y almacenes de cadena.
Preparación del té.
La preparación de este producto puede ser de dos formas.
La primera es una manera más artesanal:
Se calienta el agua.
Emplear té de hoja suelta; en una tetera apropiada; llenar un hervidor con agua fría y llevarlo a ebullición.
Cuando esté el agua hirviendo; añadir un poco a la tetera que contiene las hojas de té, se remueven bien por las paredes se tiran.
Verter el agua hirviendo sobre las hojas.
Tapar la tetera y dejar en infusión durante los minutos precisos según el tipo de hoja. Y se filtra.
Listo para servir en taza.
La segunda es la opción comercial:
Son los sobres a modo de agua aromática que venden en los supermercados y tiendas naturistas.
Solo se necesita hervir el agua y dejar que el contenido del sobre se disuelva.
También, para que logre un poco más de sabor, se le puede agregar una cucharita dulcera de azúcar. También, el azúcar se le puede agregar a la infusión.
No muchas personas lo han adoptado a su rutina de vida, pero cada vez se empiezan a concientizar del consumo de esta planta, que también, y después de los estudios que hizo la Sociedad Americana de Cáncer, se dice que la ingesta de esta reduce los riesgos de contraer esa enfermedad que en los últimos años ha cobrado la vida de muchas personas en todo el mundo.
Redacción: Abreu, Glabeana con fuente web.